Redacción
Propuesta de vivienda protegida del Gobierno español
BRUSELAS, 23 de octubre de 2025 (EUROPA PRESS) – El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha manifestado su intención de proponer a los líderes de la Unión Europea la creación de un fondo específico destinado a la construcción de vivienda protegida, junto con otras medidas para controlar los precios en zonas tensionadas y regular las viviendas turísticas.
Contexto de la propuesta
La cumbre del Consejo Europeo que se ha iniciado hoy en Bruselas es el primer encuentro en el que se debatirá la crisis de la vivienda en el continente. En este contexto, España presentará varias iniciativas para abordar esta problemática, según ha confirmado Sánchez en declaraciones a los medios a su llegada a la reunión.
Medidas propuestas
Entre las propuestas, se contempla la habilitación de un «fondo específico» para la construcción de vivienda protegida a nivel europeo. Además, se plantearán medidas legales que provendrán «desde Europa» con el fin de frenar la especulación en el mercado de la vivienda para uso no residencial, según han indicado fuentes gubernamentales.
Asimismo, Sánchez planteará la necesidad de establecer «palancas a nivel europeo» para poder actuar en las zonas tensionadas de las grandes ciudades, donde los precios del alquiler están creciendo «exponencialmente» debido a la «presión del turismo».
Un problema europeo
El presidente ha enfatizado que la dificultad para acceder a una vivienda representa un problema «europeo» que afecta tanto a jóvenes como a personas mayores en todo el continente. «Cuando hablamos de un pilar social y de una Europa al servicio de los ciudadanos, también debemos hablar de vivienda», ha afirmado.
Reunión con alcaldes europeos
Durante la misma jornada, Sánchez destacó la relevancia de la reunión que mantuvo el presidente del Consejo Europeo, António Costa, con alcaldes de grandes ciudades europeas, donde se encontraba también el alcalde de Barcelona, el socialista Jaume Collboni. En este encuentro, los alcaldes de capitales como Roma y París pidieron a las instituciones comunitarias «palancas e instrumentos legales» para hacer frente a la crisis de vivienda.
