El presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, ha considerado este lunes que el inversor mexicano David Martínez, propietario del 3,86% del capital del banco y tercer mayor accionista individual, podría estar inclinado a aceptar la OPA de BBVA pensando más en su beneficio personal que en el cliente, aunque ha expresado que no se siente traicionado por él.
SITUACIÓN ACTUAL
Oliu ha comentado que «su motivación no es la que es la nuestra, y cuando digo nuestra me refiero a la de los accionistas minoritarios, de los cuales yo me siento representante», en declaraciones realizadas a Rac1, a solo días de finalizar el plazo de aceptación de la oferta.
Además, ha manifestado que «me gustaría que pensases como yo, pero entiendo que tú no eres un accionista catalán. Entiendo que tú, los clientes, no sabes qué son, que estás fuera de este mundo y que eres un inversionista de Wall Street que busca maximizar el beneficio en todo momento. Quizás ahora te parece que esto es una buena opción porque crees en el tamaño en abstracto», ha afirmado Oliu.
Frente a esto, ha respondido: «Creo en el tamaño también, pero creo en el tamaño en concreto y en la realidad concreta. Nuestro tamaño hoy es suficiente para ser rentable y ofrecer un buen servicio, mejor que un banco internacional».
Oliu ha insistido en que «lo que queremos es dar apoyo a un banco catalán con proyección española que tiene una presencia regional que anima a los empresarios a seguir adelante con sus proyectos».
EL FUTURO DEL BBVA
En cuanto a los rumores sobre un posible pacto entre BBVA y Martínez, que ya han sido desmentidos por el accionista mexicano, Oliu ha expresado que confía en las afirmaciones de éste, ya que «manifestó desde el primer momento su posición».
Asimismo, ha avisado que «si el BBVA no alcanza el 50%, lo normal sería que cada uno se dedica a lo suyo y deje al Sabadell seguir su camino, que de momento genera valor». Oliu sostiene que sus números indican que BBVA está «muy lejos del 50% de adhesión. Es prácticamente imposible que llegue al 50%». Por otro lado, menciona que están en torno al 30%, según las estimaciones que han recibido de los accionistas.
Finalmente, ha resaltado que si BBVA se queda entre el 30% y el 50% de aceptación de la OPA, «tendrá 24 horas para decidir si acepta el resultado. Si decide seguir adelante, la ley le obliga a hacer una segunda OPA», aunque Oliu augura que esto no ocurrirá.
Sobre qué aconsejar a los accionistas que todavía dudan, ha señalado que «por este valor no merece la pena» y ha enfatizado que el proyecto de la entidad catalana puede ofrecer un rendimiento mayor que el que podría obtenerse con BBVA.
