Redacción
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha iniciado la fase de audiencia pública de la propuesta inicial de desarrollo de la red de transporte de energía eléctrica con horizonte 2030, que prevé una inversión de unos 13.600 millones de euros hasta el final de la década para el refuerzo de las redes nacionales. La propuesta, cuya fase de consulta se prolongará hasta el próximo 16 de noviembre, se orienta a cubrir las necesidades del país y a cumplir los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2023-2030 (PNIEC), otorgando prioridad a los proyectos industriales, indicó el Ministerio.
Mientras las planificaciones anteriores se orientaban a incorporar más energía renovable en el sistema eléctrico, ahora se prioriza atender las necesidades de los proyectos que quieren materializarse para consumir la energía limpia y competitiva del país. Además, se busca aprovechar las oportunidades industriales, laborales, económicas y sociales de la transición energética. La vigente planificación considera dos gigavatios (GW) de demanda, mientras que esta propuesta plantea atender a más de 27 GW.
El mayor volumen de inversión, un 25% del total, corresponde a la partida para el refuerzo de la red con objeto de alojar los nuevos flujos derivados de la electrificación e integración de renovables. El capítulo de enlaces supondrá el 23%, y el conjunto de actuaciones necesarias para dar apoyo a la red de distribución y conectar los nuevos consumos a la red de transporte asociados a la electrificación y digitalización de la sociedad representará un 16%. De esta manera, un 65% del total de la inversión -unos 8.840 millones de euros- se plantea para tres partidas principales: reforzar las redes para absorber nuevos flujos, aumentar la cohesión territorial con nuevos enlaces entre sistemas, y actuaciones de apoyo a la red de distribución.
Demanda de 375 TWh en el sistema peninsular
El escenario de estudio prevé una demanda de 375 teravatios hora (TWh) en el sistema peninsular, frente a 344 TWh en el escenario PNIEC, con una punta de 61,4 GW, un 60% superior a la punta de 2024. Este escenario permite tener en cuenta las incertidumbres ligadas al despliegue de estas nuevas demandas. Aproximadamente un 25% de las propuestas de demanda se han incorporado tanto en la red de transporte como en la de distribución. En los sistemas no peninsulares no se ha identificado la necesidad de diferenciación.
En relación al nuevo parque generador, se estima la integración de 159 GW de renovables, así como disponer de más de 22 GW de almacenamiento. En caso de disponer únicamente de la red de partida, se estima que para 2030 no se podría atender a más de 3.200 gigavatios hora (GWh) anuales de nuevas demandas. Por limitaciones de la red de transporte, no se podría integrar más de 29.000 GWh/año de producción renovable, y se estima que el vertido por esta causa sería aproximadamente del 12% de su potencial producción.
Interconexiones y reducción del coste de suministro
En lo que se refiere a las interconexiones, se incluyen los proyectos del Norte con Portugal, del Golfo de Vizcaya con Francia y el refuerzo de la interconexión con Marruecos, con inversiones cercanas a los 5.000 millones de euros. El Gobierno estima que esta planificación beneficiará a la sociedad mediante la reducción de las restricciones técnicas y garantizará la sostenibilidad económico-financiera del sistema eléctrico.
Más de 4.440 millones de euros de las actuaciones incorporadas al plan permitirán reducir el coste de suministro eléctrico y las restricciones técnicas identificadas en el escenario de estudio 2030. Estas restricciones se producirían principalmente por la imposibilidad de integrar producción renovable para asegurar el control de la tensión en condiciones de seguridad. Además, el plan de desarrollo incluye mejoras en 9.500 kilómetros de líneas, que representan un 21% de la red de transporte actual.
Nuevas necesidades tras el horizonte 2030
Adicionalmente a las infraestructuras planificadas para el periodo 2025-2030, se han identificado como necesarias más interconexiones con Francia y apoyos a la red de distribución para acompasar el crecimiento asociado al desarrollo de viviendas en distintas zonas de Madrid. También se ha identificado como necesaria una nueva conexión submarina entre Gran Canaria y Fuerteventura, así como refuerzos para la alimentación eléctrica de infraestructuras estratégicas de la futura red de hidrógeno.
El gabinete dirigido por Sara Aagesen destacó que la propuesta se ha diseñado sobre las aportaciones de los distintos agentes y de las comunidades autónomas. Por primera vez se han mantenido reuniones con ellas antes de la audiencia pública, lo que refuerza el compromiso con la integración de nuevas demandas de generación y consumo en el horizonte temporal abarcado.
