MADRID, 6 de octubre de 2025 (EUROPA PRESS) – El gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá, ha negado que exista actualmente una burbuja inmobiliaria en lo que respecta a los precios de la vivienda, aunque ha asegurado que el organismo tiene las herramientas necesarias para intervenir en caso de ser necesario.
Durante su intervención en el ‘XV Encuentro Financiero’, un evento organizado por KPMG y Expansión, Escrivá explicó que el nivel de precios de la vivienda, deflactado por el IPC, está en niveles similares a los de 2005. Además, recordó que los precios habían subido un 20 % hasta alcanzar su pico en el año 2007.
«Cuando se habla de burbuja quiere decir que en algún momento va a explotar, por eso hablamos de burbuja», señaló Escrivá. También indicó que antes de la crisis de 2008 hubo un «aumento de oferta desmesurada», acompañado de un crédito promotor «desbocado», lo que llevó a las familias a realizar esfuerzos extraordinarios para acceder a una vivienda.
Sin embargo, según el gobernador, esto no está ocurriendo actualmente. En lugar de una burbuja, hay una «insuficiencia de oferta», lo que genera un escenario muy diferente al de la crisis anterior. Escrivá enfatizó que, a diferencia de la situación de 2008, ahora existen instrumentos para moderar la demanda de crédito.
Herramientas del Banco de España en Caso de Burbuja
Escrivá destacó que «el Banco de España dispone de herramientas para fijar límites en los estándares de crédito». En la actualidad, el organismo está llevando a cabo «trabajos internos» para activar dichos límites si la situación lo requiere. Sin embargo, aclaró que «no vemos las condiciones» para proceder a su activación en este momento.
En cuanto a las previsiones macroeconómicas, Escrivá comentó que la revisión de las proyecciones se debe en gran medida a que los datos del segundo trimestre «han sido mejores de lo esperado». Indicó que, si tuvieran que rehacer las previsiones para este año, éstas serían tres décimas superiores únicamente por el efecto aritmético de la revisión de datos que ha ido realizándose periódicamente.
Finalmente, sobre la oferta pública de adquisición (OPA) de BBVA sobre Banco Sabadell, Escrivá se limitó a opinar que ha sido un proceso muy largo y que si hubiera sido más corto, los bancos podrían haber hecho un «mejor uso de sus energías en otras direcciones».
